Factsheet: La Reconquista

IMPACTO: El mito histórico de la Reconquista ha sido adoptado como uno de los tropos más recurrentes por los partidos de extrema derecha occidentales. Aunque es un concepto controvertido y puesto en tela de juicio por muchos académicos, la Reconquista ha sido una noción reapropiada, malinterpretada y mal utilizada con el fin de liderar agendas políticas construidas sobre sentimientos anti-islámicos y ultranacionalistas.

La  “Reconquista” se refiere al episodio en la historia de España que comprende una serie de campañas militares (durante los siglos XI y XII de la era actual) acometidas por soldados cristianos entre los cuales había varias órdenes de monjes soldados  tales como los Caballeros de las Órdenes de Hospitaller, Templaria y Calatrava para llevar a cabo lo que ellos entendían como la liberación de Al-Andalus, territorio que comprendía una parte significativa de lo que hoy en día es España y el sur de Portugal.

Los musulmanes, pertenecientes a diferentes grupos étnicos y ramas del Islam (sobre todo moros y bereberes) llegaron en el año 711 y se asentaron en la Península Ibérica durante más de 8 siglos, dejando una huella profunda en la historia, la cultura y la sociedad española a muchos niveles.  Los musulmanes de Al-Andalus eran conocidos como “moros,” término que procede del Latin “Maurus,” denominación que originalmente se aplicó a los Imazighen (plural de Amazigh) y a otros habitantes de la provincia romana de Mauritania. La terminología genérica “moros” comenzó a utilizarse por los cristianos europeos para referirse a los musulmanes de Iberia, el norte de África, y Europa. Utilizando términos de descripción racial contemporánea, los moros se describen como negros.

La Reconquista duró más de 2 siglos, atrajo a muchos caballeros cristianos de toda Europa y terminó con la rendición del emirato de Granada (la llamada “Toma de Granada,” el 2 de enero de 1492), el único reducto fortificado en poder del sultán Boabdil, el último monarca nazarí, a los Reyes Católicos. 

El uso del tropo de la Reconquista supone la revalorización del patriotismo histórico y mitológico a través del reconocimiento, conmemoración y recreación de acontecimientos “gloriosos” de la historia de España. El término comenzó a ser utilizado a comienzos del siglo diecinueve, reemplazando la noción de “Restauración,” como un símbolo político en una época en la que los habitantes de la Península Ibérica buscaban reforzar la formación de estados mientras combatían  las fuerzas invasoras del emperador Napoléon.  Los historiadores generalmente se muestran de acuerdo en que el concepto no se encuentra en las crónicas medievales. La palabra “Reconquista” se utilizó de nuevo durante el régimen de Francisco Franco. Descrito como el “Líder de la Nueva Reconquista,” el dictador prometió liberar al país de musulmanes, ateos, masones y comunistas. 

De hecho, algunos académicos han descrito la “Reconquista” como un “concepto sesgado y simplificado”. La historia de la Conquista es incorrecta y se describe de manera cuestionable como Reconquista, implicando la recuperación de tierras por parte de la cristiandad (Asturias, Navarra, Aragón, Castilla, y  León) que coexistían en la  Península Ibérica. Previa a la invasión de los Amazigh y los musulmanes árabes en el año 711, los reinos habían sobrevivido a las invasiones de romanos, alanos, vándalos, y visigodos.  Muchos estudiosos del tema han señalado que la Reconquista conlleva implicaciones ideológicas en las que los verdaderos españoles eran los cristianos mientras que los musulmanes eran los invasores ilegítimos que debían ser expulsados. Es una narrativa que subraya que “España se construyó sobre su confrontación con el Islam”. En términos prácticos, significa negar el rol fundamental de Al-Andalus y de la influencia musulmana en el proceso de construcción de lo que posteriormente sería conocido como España.

En siglos posteriores, incluido el actual siglo XXI, La Reconquista ha sido estratégicamente mal utilizada y reinterpretada por movimientos políticos de extrema derecha para reclamar históricamente una España gloriosa y cristiana como telón de fondo para poner en práctica sus agendas políticas. 

El Partido político de extrema derecha, VOX, fundado en 2013, ha hecho de la Reconquista uno de los elementos centrales en la construcción de su concepto de identidad española contemporánea. Para VOX, la Reconquista tiene lugar hoy en día, implicando que se está reconquistando el país de enemigos que, afirman desde el partido, se han apoderado del país. Como puede leerse en su programa político, tales enemigos tienen una doble naturaleza: externa, como los inmigrantes ilegales que traspasan nuestras fronteras e internos, como los separatistas catalanes y el actual gobierno socio-comunista que, a ojos de la fuerza de extrema derecha, amenazan la unidad y estabilidad del país.

VOX ha evocado de manera consistente la Reconquista en sus mensajes y campañas políticas. Desde el comienzo de la campaña andaluza a finales de diciembre de 2018, el partido ha aludido continuamente a sucesos históricos que enfatizan pasadas victorias de los cristianos sobre los musulmanes. Cuando Abascal visitó Córdoba— ciudad que fue centro europeo de la cultura (con una biblioteca de más de 400,000 volúmenes), conocimiento (fueron fundadas más de 27 escuelas y una universidad) y política durante la dinastía Omeya— para celebrar un mitin electoral, afirmó que, con la victoria de VOX, la Gran Mezquita de Córdoba— una antigua mezquita reconvertida en catedral católica— sería considerada exclusivamente “catedral” (y no mezquita).

La Mezquita de Córdoba originariamente un templo romano más tarde convertido en una iglesia cristiana visigoda hasta que el Emir Abd ar-Rahman construyó en su lugar la Gran Mezquita que aún permanece. En 1236, cuando Fernando III “El Santo” conquistó Córdoba, la convirtió en una catedral católica. El debate sobre la naturaleza religiosa híbrida de la Gran Mezquita siempre ha estado en el centro de la política y sociedad española. La Mezquita de Córdoba es la segunda más grande del mundo tras la Meca y su sobresaliente arquitectura la convierte en uno de los monumentos más visitados del país. 

En la misma campaña electoral andaluza, Abascal estableció su preferencia por figuras históricas asociadas con la violencia histórica contra los musulmanes, como los Reyes Católicos y Fernando González de Córdoba, también conocido como “El Gran Capitán,” sobre Almanzor (al-Manṣūr), líder del Califato Omeya de Córdoba y, de facto, líder de Al-Andalus.  Sólo unos meses más tarde, VOX comenzó su campaña electoral nacional de 2019 en Covadonga (ciudad en Asturias en el norte de España), origen de las Cruzadas Ibéricas y cuna de Don Pelayo, el comandante político que lideró la ofensiva militar contra los musulmanes. Desde ese lugar, VOX finalizó su periplo electoral en Granada, siguiendo la ruta militar de las Cruzadas a través de sus campañas políticas. En 2019, Ortega Smith, secretario general de VOX, declaró, “La Reconquista contra el radicalismo islámico no ha finalizado.”

Además de VOX, otros partidos políticos en España han evocado a la “Reconquista” como símbolo emblemático del país. Pablo Casado, líder del conservador Partido Popular, la mencionó durante la campaña política del partido en  2019,  afirmando entonces que “la  Reconquista comenzará en Granada,” siguiendo la ruta inversa (desde Granada hacia el norte) de las Cruzadas Ibéricas. No era la primera vez que el líder del partido utilizaba ese tropo. En marzo de 2019, Pablo Casado hizo referencia al objetivo de su partido de“comenzar la Reconquista de España,” a lo que los seguidores de VOX reaccionaron en las redes sociales, afirmando que Casado no merecía ser asociado con tal acontecimiento.  También publicaron una foto de su líder, Abascal, llevando un  casco histórico. Tal y como informó El Español, sin embargo, ese tipo de casco era anacrónico ya que no apareció hasta los siglos XVI y XVII —tras la conquista de Granada por los Reyes Católicos.

La celebración anual del  2 de enero para conmemorar el fin de la conquista católica sobre los musulmanes en  al-Andalus, la Toma de Granada , ha sido siempre un asunto fundamental para VOX. En los últimos años, las celebraciones del aniversario han sido  controvertidas, con distintas asociaciones que han descrito la fiesta como “discriminatoria y sectaria.” VOX quiere que la Toma de Granada sea declarada oficialmente como el “Día de Andalucía”. Esta exigencia fue uno de los  requisitos oficiales  que impusieron al Partido Popular a cambio del apoyo para formar un gobierno conservador en el Parlamento andaluz tras las elecciones de 2018. VOX no tuvo éxito en sus requerimientos, sin embargo, y el Día de Andalucía se celebra todavía el 28 de febrero, el orígen de tal conmemoración se remonta al referéndum de 1980 que llevó a Andalucía a convertirse en una comunidad autónoma de España. 

Durante la celebración del Día de Andalucía en febrero de 2021, el representante de VOX en el parlamento andaluz, Francisco Ocaña, declaró que la  Toma de Granada fue “el culmen de la reconquista, en la que Isabel y Fernando fueron capaces de aunar los esfuerzos de todos los españoles de su tiempo para una empresa común: acabar con el yugo islámico en la península y unificar todos los reinos de España”. La cuenta oficial del partido en Twitter account escribió, “aún permanece el orgullo imborrable por una gesta de siete siglos y la determinación de no someternos al Islam”.

En los últimos años, organizaciones y  movimientos de la derecha radical de toda Europa han adoptado la narrativa de la Reconquista como símbolo unificador de movimientos nacionalistas supremacistas construidos sobre el odio anti-musulmán y las teorías de la conspiración. Ejemplos de ésto pueden encontrarse en la red de extrema derecha “Reconquista Germánica” que apoya a Alternativa Germánica (Alternative für Deutschland/AfD), firme proponente del “etno-nacionalismo, el racismo anti-musulmán, el anti-feminismo y el rechazo a la inmigración”, incluso incorporó el concepto en su denominación y organiza la acción digital contra sus oponentes políticos a la vez que fomenta las agendas de movimientos y partidos de extrema derecha en el espacio virtual.